La pasada semana santa, con tantos días de fiesta, había que buscar alguna actividad para tener entretenidos a los niños, así que una tarde que hacía sol, jugamos a ser artistas, a pintar un cuadro con el caballete aprovechando la sombra en el patio!
Teníamos unas cajas que mi tía les regaló, en ella se incluye todo lo necesario para pintar un cuadro, con su lienzo, pinceles y pinturas y un libro para aprender los colores en inglés.
Lo podéis encontrar en Abacus, es Pinta un cuadro con Martín el pingüino y por menos de 15 euros tienes un libro y una actividad artística para los más peques.
A los niños les encanta aprender nuevos idiomas, y me sorprendió que el peque con sólo 3 años ya supiera la mayoría de colores en inglés.
Yassin, con un poco más de paciencia iba pintando cada parte intentando no salir del dibujo.
Naïf, que ha estudiado Miró en el cole, hizo un dibujo mucho más abstracto!
Lo difícil fue conseguir hacer sus firmas con los pinceles... al final optamos por el rotulador, porque sin la firma del artista la obra no está acabada!
Que obras de arte mas bonitas con tantos colores! Aunque a veces ponerse a pintar con los niños es un caos, por las manchas, porque se cae el bote de agua donde limpian los pinceles... pero al final el resultado es precioso, y ellos están orgullosos de tener un cuadro suyo colgado en la habitación!
Yo quería ser artista así que intento que los niños conozcan, experimenten y creen con sus propias manos. Es muy importante fomentar la creatividad desde edades tempranas porque así aprenden mientras se divierten!
Y vosotras, sacáis los pinceles y pinturas con los peques de casa?
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